--¡Vamos por la Virgen! --gritó uno de los prohombres de la confradía.
El vello de los brazos y las piernas de Arnau se erizó.
Aquel día no había barcos que cargar o descargar y en el puerto se arremolinaban únicamente las pequeñas embarcaciones de pesca. Se habían reunido en la playa, como siempre, mientras asomaba un sol que prometía una jornada primaveral.
Desde que se había unido a los bastaixos, al inicio de la época de navegación, no habían tenido oportunidad de dedicar un día a trabajar para Santa María.
--¡Vamos por la Virgen! --se volvió a oír desde el grupo de bastaixos.
Arnau se fijó en sus compañeros: los rostros adormilados se transformaron en sonrisas. Algunos se desperezaron moviendo los brazos hacia atrás y hacia delante, preparando las espaldas. Arnau recordó cuando les daba agua, cuando los veía pasar por delante de él encorvados, apretando los dientes, cargados con aquellas enormes piedras. ¿Sería capaz? El temor atenazó sus músculos; quiso imitar a los bastaixos y empezó a desentumecerlos moviéndolos hacia adelante y hacia atrás.
--Tu primera vez --le felicitó Ramon. Arnau no dijo nada y dejó caer los brazos a los costados. El joven bastaix entornó los ojos--. No te preocupes, muchacho --añadió apoyando el brazo sobre su hombro e instándolo a seguir al grupo, que ya se había puesto en movimiento--; piensa que cuando cargas piedras para la Virgen, parte del peso lo lleva ella.
Arnau levantó la mirada hacia Ramon.
--Es cierto --insistió el bastaix sonriendo--, hoy lo comprobarás.
Ildefonso Falcones, La Catedral del Mar, pp. 213-4_____________
Esta novela de época conta a história da construção da igreja de Santa Maria del Mar no bairro da Ribera em Barcelona no século XIV. Ao contrário da sé catedral da cidade, construída na mesma altura, o templo de Santa María foi construído pelo e para o povo. Mais pormenores aqui.
Sem comentários:
Enviar um comentário